Un pequeño aeropuerto dándonos la bienvenida, un mar de montañas nevadas o un gran glaciar a vista de pájaro (o más bien de helicóptero). Huellas de un glorioso pasado vikingo, una yegua con su potrillo y un mar de flores en Qassiarsuk a orillas del fiordo de Tunulliarfik, el mismo por el que arribara Erik El […]
La entrada El sur de G...
Si te gusto esta noticia puede que te interesen estas..